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Un termosifón es un completo sistema de colector, intercambiador de calor y deposito montado sobre una estructura para la producción de agua caliente sanitaria (ACS) a través de energía solar térmica.
Las instalaciones con termosifón están destinadas a cubrir el consumo de ACS de una vivienda unifamiliar de entre 2 y 10 habitantes.
Como principal ventaja contamos con que es una instalación muy sencilla, que se puede realizar en un dia, que apenas ocupa espacio ya que va todo montado sobre una estructura, normalamente colocada en el tejado de la vivienda. Otra gran ventaja es que no necesitamos electricidad para su funcionamiento, ni tampoco una bomba para mover los fluidos, todo funciona por la inercia natural del calor.
El termosifón tiene una amortización rápida entorno a 3-6 años produciendose un ahorro de hasta un 80%, dependiendo sobre todo de la zona climatica de la peninsual y del combustible a sustituir.
La principal desventaja del termosifón es la perdida de calor que puede tener al estar expuesto a la interperie y las inclemencias del tiempo, cosa que se puede solucionar en gran medida dependiendo del aislante del que disponga el depósito. Con los termosifones de Cambio Energético no tendrás ese problema ya que vienen provistos de los mejores aislantes térmicos.
Como para casi todas las instalaciones hay diferentes tipos de captadores, intercambiadores de calor y depósitos.
El funcionamiento del termosifón es el siguiente, la radiación solar incide sobre el captador donde se produce un efecto invernadero. Esto consigue que dentro del captador se alcancen temperaturas muy altas, de hasta unos 150ºC.
A partir de ahí se comienza a calentar el fluido calorportador que circula hasta el intercambiador de calor dentro del depósito.
El intercambiador de calor dentro de depósito suele tener forma de serpentín roscado en el fondo del depósito, esto tiene una explicación y es que el agua caliente tiende a subir, por lo que es preferible empezar a calentar desde abajo para tener la mayor cantidad de agua caliente dentro del depósito. Cabe destacar que el fluido calorportador suele ser un fluido anticongelante por lo que nos permite aguantar temperaturas muy bajas sin congelarse y nunca está en contacto con el ACS.
El depósito es la otra parte importante de nuestra instalación de termosifón, el depósito es la parte que alberga el agua caliente sanitaria y el intercambiador de calor, como propiedad principal del depósito es que tiene que estar muy bien aislado para que no se produzcan fugas térmicas y baje la temperatura interior. La mayoria de los termosifones de Cambio Energético tienen 10 años de garantía y sus capatadores de vidreo selectivo, por lo que tienen una alta eficiencia y baja perdida de energía.
Un termosifón es un completo sistema de colector, intercambiador de calor y deposito montado sobre una estructura para la producción de agua caliente sanitaria (ACS) a través de energía solar térmica.
Las instalaciones con termosifón están destinadas a cubrir el consumo de ACS de una vivienda unifamiliar de entre 2 y 10 habitantes.
Como principal ventaja contamos con que es una instalación muy sencilla, que se puede realizar en un dia, que apenas ocupa espacio ya que va todo montado sobre una estructura, normalamente colocada en el tejado de la vivienda. Otra gran ventaja es que no necesitamos electricidad para su funcionamiento, ni tampoco una bomba para mover los fluidos, todo funciona por la inercia natural del calor.
El termosifón tiene una amortización rápida entorno a 3-6 años produciendose un ahorro de hasta un 80%, dependiendo sobre todo de la zona climatica de la peninsual y del combustible a sustituir.
La principal desventaja del termosifón es la perdida de calor que puede tener al estar expuesto a la interperie y las inclemencias del tiempo, cosa que se puede solucionar en gran medida dependiendo del aislante del que disponga el depósito. Con los termosifones de Cambio Energético no tendrás ese problema ya que vienen provistos de los mejores aislantes térmicos.
Como para casi todas las instalaciones hay diferentes tipos de captadores, intercambiadores de calor y depósitos.
El funcionamiento del termosifón es el siguiente, la radiación solar incide sobre el captador donde se produce un efecto invernadero. Esto consigue que dentro del captador se alcancen temperaturas muy altas, de hasta unos 150ºC.
A partir de ahí se comienza a calentar el fluido calorportador que circula hasta el intercambiador de calor dentro del depósito.
El intercambiador de calor dentro de depósito suele tener forma de serpentín roscado en el fondo del depósito, esto tiene una explicación y es que el agua caliente tiende a subir, por lo que es preferible empezar a calentar desde abajo para tener la mayor cantidad de agua caliente dentro del depósito. Cabe destacar que el fluido calorportador suele ser un fluido anticongelante por lo que nos permite aguantar temperaturas muy bajas sin congelarse y nunca está en contacto con el ACS.
El depósito es la otra parte importante de nuestra instalación de termosifón, el depósito es la parte que alberga el agua caliente sanitaria y el intercambiador de calor, como propiedad principal del depósito es que tiene que estar muy bien aislado para que no se produzcan fugas térmicas y baje la temperatura interior. La mayoria de los termosifones de Cambio Energético tienen 10 años de garantía y sus capatadores de vidreo selectivo, por lo que tienen una alta eficiencia y baja perdida de energía.